jueves, 11 de octubre de 2012


Conexiones a mi caso de estudio
 
 
Las culturas de rendición de cuentas vs las culturas de corrupción; en mi publicación hice mención a que el ser humano ha perdido esa sensibilidad para con sus semejantes las organizaciones de corrupción creo que son el resultado de ese efecto, ya que al no importarme nadie más que yo, no veo que mis acciones perjudican y hieren a otros. La insensibilidad a la que se nos ha enfrentado, ha hecho que los generaciones jóvenes pierdan valores que por la forma en que me educaron creo que nos hacen mejores personas.
 
Si nos nos inculcan los valores de responsabilidad, respeto, amor, no podemos aportar cosas buenas a la sociedad, y por lo tanto crear un cambio o un impacto social, comenzando desde nuestro entorno.
 
Obviamente si a mi no me interesa los demás, siento que no tengo porque rendir cuentas de lo que hago o no hago, en el caso de funcionarios por ejemplo, no sienten responsabilidad del manejo de los bienes, solo ven por su bien personal, y eso nos ha llevado un situación difícil.
 
 
 
Aportación personal.
Mis alumnos son un ejemplo de como las mentalidades de los jóvenes se han visto muy afectadas, por la realidad a la que los enfrentamos. Al hablarles de ética y valores, me contesta "No Miss, eso ya no existe, el que no tranza no avanza", textualmente sus palabras, y es triste que al tratar de motivarlos a que ellos hagan un cambio en sí mismos y con ello cambiar esa realidad sean tan negativos, no creen que existan organizaciones que si ayudan a la gente, que existen empresas que no son corruptas, que existen muchas personas que son honestas. Eso es algo muy triste.


2 comentarios:

  1. Hola Beatriz, coincido contigo es triste que ya los niños hallan interiorizados como propios ideas como "el que no tranza no avanza". Saludos

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  2. Es interesante cómo relacionas el nivel de interés por los demás con la corrupción. Tal vez sea un camino de cambio hacia la rendición de cuentas.

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